Y eso que no empieza mal. En mi opinión la primera media hora toma clara referencia de aquella 'Hardcore, un mundo oculto' (1979), de Paul Schrader, en la que un hombre de mediana edad y de posición acomodada se ve recorriendo los sórdidos establecimientos que ofertan sexo al enterarse de que su hija podría haber sido forzada a trabajar en ese mundo. La inexperiencia y el retraimiento son de hecho muy parecidos entre ambos personajes.

Pero no he visto nada de 'Un día de furia' (Douglas irradia mayor carisma, resulta más sarcástico desde el minuto uno y la susodicha cinta claramente tiene vocación de película de acción) ni mucho menos de 'Taxi Driver' (si bien por De Niro se podría llegar a sentir cierta simpatía, por este pánfilo ni de lejos, además las motivaciones y el punto de partida son muy diferentes, si Travis lo hacía por limpiar la ciudad, este es un tipo que se resiente porque no lo aguanta nadie y está solo). Por otro lado, los diálogos, mejor dicho, monólogos, como bien señalan por ahí me parecen infumables; de hecho solo hay dos momentos que de verdad rescato, cuando al principio, Mantegna tras haber escuchado la perorata de Macy le dice a este en señal de despedida que escuche a otro cuando tenga mal día al igual que él [Mantegna] lo acaba de hacer [con Macy], y cuando Macy contraataca con cuchillo a otro negro cabrón estafador que le quiere robar. Eso sí, lo que viene a continuación lamentable, me refiero a esa ridícula jactancia de Macy que de repente se cree un superhombre y comienza a desvariar.