El arte sin duda alguna es todo una dulzura, con trazos y composición de colores completamente suaves y ligeros; desde un comienzo te hace notar que la serie no sera nada usual y comprenderá una carga emocional algo elevada.

De antemano es recomendable tener una buena disposición y una actitud completamente abierta, ya que en tan solo 11 episodios se verán inmersos en una trama que ademas de no solo hacer énfasis en una temática controversial, hace que cada uno de los personajes tenga una humanización increíble.

En lo personal, en un principio me sentí aturdida pero poco a poco es difícil el no crear una relación con el personaje principal y dejarse llevar por todos y cada uno de los acontecimientos. Al final y en el ultimo instante desee que pudiese seguir la historia.