Haz click aquí para copiar la URL
España España · Honor al Sabadell!
Voto de Grandine:
5
Drama Suecia, 1782. Jacob, un joven noble, alocado y algo vehemente, retorna de sus estudios en Francia. Después de su ausencia, le alegra volver a su hogar, pero le hace más feliz reencontrarse con su querida hermana Charlotte. Sin embargo ésta se ha prometido al barón Alsmeden, hombre de gran influencia en la corte, lo que despierta en Jacob un sentimiento parecido a los celos... (FILMAFFINITY)
19 de octubre de 2007
30 de 36 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hay que reconocerlo, tras ver "Mi hermana, mi amor" uno tiene que rendirse ante la evidencia y saber constatar que Vilgot Sjöman (del cual ya vi anteriormente "Soy curiosa: Azul") era un cineasta inteligente, uno de esos tipos que cuando cogían la cámara sabían que hacer con ella, pues todos y cada uno de sus planos están repletos de una intencionalidad increible, son planos que nos cuentan algo indirectamente, que nos hablan sobre sus personajes, sobre sus relaciones, y todo ello sencillamente colocando la cámara en un lugar u otro.
La puesta en escena no resalta en exceso, y se ve solapada por una fotografía en blanco y negro que no despunta demasiado y no resulta todo lo lograda que podría haber estado, así como los demás aspectos técnicos tampoco son gran cosa y sencillamente son una vía bastante prescindible para que Sjöman pueda trasladar la historia que nos aborda sin carencias, pero sin lucidez en ese apartado.

No hay, pues, demasiado que decir sobre formalidades, amen de la habilidad ya mencionada al principio con la que el realizador juega constantemente con sus planos y desenfoques, pero si nos introducimos en la historia, que se supone debe ser el eje principal de la cinta, no hallamos tampoco ni un ápice de solidez, originalidad o intensidad.
Puede que el hecho relatar unos acontecimientos que, encajados en esa época, debieron ser controvertidos, aporte un poco de interés al asunto, lo malo es que ese amorío hermana-hermano se cuenta sin hacer hincapié en diversos temas que podrían haber sido provechosos, dejándolos de lado y tiñiendo el trabajo de Sjöman de una simplicidad y un hastio demasiado grandes.

Sus personajes, además de que podrían ser definidos en una línea (el vanidoso, la prudente, etc..) cosa que no dice demasiado a su favor, actúan sin prácticamente motivaciones, es decir, les vemos tomar una decisión u otra, pero en ningún momento sabemos porque lo hacen, porque dirigen hacía un lado u otro sus acciones, o porque deciden lo que deciden, y todo queda en un trazo bastante ínfimo de lo que prometían ser unos protagonistas mucho más jugosos.
Luego el tedio se apodera de la pantalla ante tanto elemento desaprovechado, y terminas sin dar demasiada credibilidad a lo que estás viendo, cosa que hace de este, un ejercicio mediocre y que en ningún instante halla un verdadero camino a seguir como para ser del todo sugestivo.
Grandine
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow