Haz click aquí para copiar la URL
España España · Honor al Sabadell!
Voto de Grandine:
6
Comedia. Acción Comedia de aventuras protagonizada por Adam West y Burt Ward, personajes de Batman. Su misión consiste en desarticular un diabólico plan para robar el Batimóvil durante una fiesta benéfica. Mientras tratan de localizar el vehículo, West y Ward recuerdan tumultuosos momentos de la serie. Creada por Bob Kane en 1939, se convirtió en una serie televisiva en 1966. Bruce Wayne (Adam West), un millonario de Gotham City es Batman, un ... [+]
1 de mayo de 2009
23 de 23 usuarios han encontrado esta crítica útil
Un homenaje a los grandes personajes que interpretaron, otra bat-intriga donde los dos actores fuesen tras algo, un recordatorio de los grandes momentos que propiciaron en pantalla, un publireportaje sobre el (nulo) crecimiento de la barriga de West durante estos años.... cualquier excusa era válida para traerlos de nuevo a la pantalla y, sinceramente, la escogida por Kaufman es, sin lugar a dudas, la mejor de todas.

Muchos podrían esperar que West y Ward se enfundaran los trajes como antaño y empezasen a repartir POW's y KAPOW's en un puro ejercicio de conmemoración, pero lo cierto es que ninguno de ellos está por la labor (aunque algo de eso hay), así que... ¿qué mejor que un repaso en forma de divertido y resultón biopic, mientras esos dos mitos vivos siguen las andanzas del Batmóvil? La respuesta, diría, es casi nada. Y digo casi, puesto que debido a que la vena cómica del equipo de guionistas no es tan acentuada ni llega a la antológica caspa de aquella mítica serie (pese a seguir con esas enormes frases de Robin -en este caso, sin traje, y con unos kilos de más-), podrían haber propuesto una vía mucho más nostálgica.

En su lugar, hallamos un leve repaso sobre la historia de estos dos actores, que se convirtieron en dos de los más emblemáticos héroes del día a la noche, no sin obviar el tratamiento ficticio de los hechos, y brindando siempre un leve deje socarrón que, pese a recordar más a otro tipo de humor que al de la propia serie, funciona en líneas generales y deja momentos de lo más distraídos en pantalla.

Cabe hacer una mención especial al trabajo de todo el equipo: tanto en la consecución de decorados, como en la elección de unos nuevos Batman y Robin (para la parte perteneciente al biopic) o en el esmerado diseño de producción, pero en especial a esos dos entrañables actores, que con su simpatía y carisma, nos recuerdan que por mucho que un día su programa desapareciera, ellos y sus diálogos, sus repetitivas y grandes tramas, o sus "ingeniosos" enemigos, siempre estarán ahí...
Grandine
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow