No deberíamos relacionar esta película con el mundo de los super héroes, al menos no en la faceta de las producciones actuales. Aunque pensándolo bien tampoco de las antiguas.

Es una película que gira en torno a super poderes, pero sin plasmarlos explicitamente. Algo hay, pero no necesariamente lo veremos. Algo se piensa, pero no necesariamente habrá una explicación teórica.

Tenemos al bueno de Bruce, un personaje apagado, poco hablador, y no precisamente lo más inteligente del barrio. Pero que es consciente para saber que algo tiene, e intentará conocerse más a sí mismo.

Y tienes al no tan bueno de Samuel, "Glass" para los amigos. Que basa su obsesión con el mundo de los cómics para llevarlo a la realidad, haciendo diferentes actos y "experimentos" para buscar una certeza a sus pensamientos.

La película me ha resultado bastante amena, muy natural, y el mensaje final, la respuesta al significado de la película me ha gustado. Sin embargo me he quedado con la sensación de que algo se me escapa, o de que algo falta.