Aprueba. Por poco, pero aprueba. La fórmula Jungla de Cristal y Bruce Willis podría ser eterna e igualmente exitosa. No cabe duda que es una saga que lleva la acción por bandera y que ha elevado a categoría de mito la figura del detective Mclaine, recordado para siempre por todos los amantes del cine.

La película comienza con una de sus mejores escenas que ponen de manifiesto el carisma e ironía del protagonista cuando ve a su hija adolescente con un chico en un coche. A partir de ahí, la ironía sale a cuenta gotas y no siempre de un modo efectivo.

La trama es correcta aunque algo desfasada en el tiempo, pero ok. El coprotagonista es de lo mejor de la película bajo mi punto de vista y la chica que odia a su papá pero que pide a gritos que le rescate también está algo manida, pero bueno todo eso puede ser perdonado.

Lo que me cuesta mucho es que Mclaine no sea un héroe con habilidades y poderes especiales claramente superiores a los humanos, como si lo es Ironman. No me puedo creer que siendo un humano normal (bien preparado ok, pero normal) sea capaz de sobrevivir a lo que sobrevive.