La línea entre el mundo de lo sobrenatural y lo terrenal es más delgada en el pueblo donde un aparente suicidio de un chico ha tenido lugar. Poco tiempo después seis chicas atraídas como autómatas hacia un claro del bosque por una luna llena roja, que solo pueden ver ellas, descubren que son brujas y que están destinadas a salvar el mundo de los demonios que habitan el otro lado.

Película sueca de misterio, thriller y fantasía no en ese orden de importancia que trata el tema de brujas adolescentes de instituto pero no desde un punto de vista infantil. Me parece que su temática es algo más madura aunque siempre queda espacio para el romance. Dura dos horas y veinte minutos más o menos y para nada se hace pesada. Lo que sí que me hubiera gustado es ver más batallas épicas de hechizos. Hay ciertos hechizos y eso siempre gusta pero no tan espectaculares como lo que aparece en la resolución de los acontecimientos.

Para el que sienta curiosidad decir que la banda sonora está compuesta y supervisada por Benny Anderson, el de «ABBA» sí, y tiene temas de Kate Bush o Fever Ray. Con esa banda sonora cualquiera se atreve a quejarse.

Total, una aparente «young adult» pero que me parece más adulta que las típicas que suelen ir saliendo todos los años y que además te tiene enganchado hasta el final. Por todo ello me parece una propuesta interesante pero que no termina de explotar todo el potencial de la magia como en casi todas las películas del estilo.

(Ni una película sin crítica).