¿Quién no ha estado en situaciones económicas difíciles?, ¿Quién no ha caído en las manos de un estafador?, ¿Quién no ha vendido algo para solucionar problemas relacionados con dinero? ¿Quién ha buscado trabajo y se le ha dificultado por la edad? Algunos más, otros menos y a final de cuentas no es ajeno.

En una forma cómica un timador cumplirá su objetivo, involucrando a personas de diferente estrato social y su habilidad verbal será su principal herramienta para cubrirse. Un carro y un departamento, así como dos desempleados y uno que otro inconciente son las víctimas idóneas para obtener un beneficio económico.

De los malos momentos, la risa como antídoto de toda depresión. Perú se ríe de sus rachas malas y hace menos atroz su realidad. Loable el poder arrebatar una carcajada a partir de una América Latina llena de corrupción.

Notable para la filmografía peruana, ligera, graciosa y de reflexión.