A pesar de que el resultado final de ‘El extranjero’ es el de un thriller de acción bastante entretenido, no puedo más que sentirme decepcionado por la gente que está involucrada en el proyecto. El tridente Brosnan / Chan / Campbell merecía correr una mejor suerte que la de un producto bonito pero fácilmente olvidable.

El principal defecto que le encuentro a la película es el de su complicada trama, perdida entre agentes británicos, terroristas del IRA y un pobre hombre de nacionalidad china que acaba de perder a su hija. La película se pierde en su entresijo de diálogos y vueltas de tuerca sobre el dilema irlandés y es una pena, porque se podría haber acortado ciertos momentos en beneficio de la acción, que cuando aparece llega de forma satisfactoria. Pero ojito, porque Campbell se arriesga en algún que otro plano complicado en el que los efectos pueden cantar un pelín. Por lo demás, el director la rueda con oficio y termina siendo un film con un buen acabado.

Jackie Chan exhibe sus habituales recursos pero más comedido que en anteriores ocasiones. La edad no tiene que ver, puesto que se sigue moviendo como siempre aunque parezca andar como un anciano. Es más el rol impuesto de hombre hundido por las circunstancias lo que hace que su faceta cómica no salga en ningún momento. Pierce Brosnan ejerce bien gracias a su porte el papel de mandatario inglés.

Es decir, demasiada política cuando uno busca más acción. ‘El extranjero’ es un film irregular que ve lastrada su dosis de entretenimiento en detrimento de sus laberintos políticos. Una pena.

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