Aunque en su filmografía aparezca otra película, Andalucía Chica, olvidarla no es suya, el que sale es un farsante que se hace llamar Antonio Molina y está mayor, no es el cantaor que se le recuerda por estas; su filmografía acaba aquí.
Una película de celos, odio reconciliación, amor, cante y flamenco, mucho flamenco.
Narra la vida de dos hermanos, uno dedicado a las tierras y campos de la familia durante años, la cría de caballos y toros, en la ¿cómo no?, Andalucía.
El otro prueba suerte en el cante y triunfa como muchos artistas antiguos y los de hoy en día en América, para luego probar suerte en su tierra natal.
A su llegada a la casa familiar (Antonio Molina) encuentra al amor de infancia (Ángela Bravo) que va a casarse con su hermano (Rafael Farina), este la intenta recuperar a espaldas de su hermano y anteponiéndola a su familia.
Como historia no está mal, entre medias intercalan números de cante para el lucimiento de Antonio Molina y Rafael Farina (bastantes números).
La película no está del todo mal, pero si no eres un fan del cante hondo te puede cansar, suerte del DVD que ciertas canciones las puedes pasar, pero en esencia se deja ver.

PD: Sobre todo estas películas son para nostálgicos o seguidores de este tipo de música, pero como película se deja ver, y no toda las canciones cansan.