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Voto de cine con palillos:
6
Comedia Historia de un hombre pobre, lujurioso, que pone intercambios con un shogun estudioso y llega a un festín con todas las concubinas que desea. (FILMAFFINITY)
20 de febrero de 2017
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tokugawa Sex Ban: Lustful Lord consigue entretener. Una trama simple que permite un desarrollo fluido a lo que apunta: mostrar erotismo, erotismo y más erotismo.

Lo que hace de Tokugawa Sex Ban: Lustful Lord sumamente interesante es, precisamente, el cómo se abordan las escenas sexuales: vertiginosas cámaras con abrutos zoom que van y vienen consiguiendo planos detalle de una u otra zona erogena (pezones, labios); también la música presente durante todo el metraje que deja en claro que estamos frente a una película que debe catalogarse dentro del género Exploitation, que a otra etiqueta (de lo contrario puede parecer fuera de contexto). Armonías medias funkys, harakiris incluidos, sexo, masturbación, desnudos, bisexualidad, abuso y claro, prohibiciones que recaen en el aspecto sexual.

La historia se sitúa en el Japón Feudal durante el periodo Edo (fines del siglo XIX) cuando el emperador de la dinastía reinante decide casar a una de sus hijas con un noble de otras latitudes del país. Se trata de un hombre de avanzada edad, virgen y misógino. El peor candidato que se pueda escoger.

La princesa, virgen hasta de pensamiento, viaja a su encuentro para contraer matrimonio y realizar “el acto sexual” con el único motivo de procrear. Ajena al deseo y al placer, la princesa se verá inmersa en un escenario de incertidumbre en donde su prometido la repudia por su frivolidad. ¿Podrán las mujeres de la casa adentrarla en el mundo del sexo?

Por otro lado, el noble también presenta sus limitaciones. No sabe cómo tratar a las mujeres. Sus sirvientes para ayudarlo le traen mujeres de distintas latitudes del planeta destacando a Sandra, una bellísima francesa apasionada. Esta suerte de muñeca sexual desatará la lujuria en un hombre otrora misógino lo que podría traer graves e inesperadas consecuencias en la población local.

Un acierto situar la historia en el Japón feudal. Tanta lujuria y perversión en un ambiente en donde lo que más importa es el honor y no blasfemar. Saca aplausos.

* cineconpalillos.com
cine con palillos
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