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España España · MADRID
Voto de Spark:
7
Musical. Romance. Drama Sara Johnson (Julia Stiles), una chica blanca de clase media de Chicago, arma un pequeño revuelo cuando se matricula en un instituto en el que predominan los alumnos de color. Sara adora el ballet y sueña con ir a Juilliard, pero, tras la muerte de su madre en un accidente, olvida sus sueños y se va a vivir con su padre, que trabaja como músico. En el instituto se encuentra con un mundo muy diferente al suyo, tanto racial como ... [+]
24 de septiembre de 2010
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Ya se ha visto mucha veces la típica película de chica nueva en el instituto que intentará encajar hasta encontrar allí la amistad y el amor (normalmente con el chico más popular y más contrario a ella).

"Espera al último baile" es otra de esas cintas... y es de las mejores de su especie. Genial para los amantes del cine adolescente, la película nos narra como su protagonista, una chica blanquita, tímida e intelectual llega nueva a un instituto americano de los barrios bajos donde todos (menos uno o dos) son afroamericanos curtidos en getto y con personalidades poco o nada parecidas a la suya.

Es cierto que la cinta no deja de lado algunos clichés sobre los personajes, sin embargo tanto el guión como los actores portan esos cliches con elegancia y dignidad, arrinconando los tópicos de sus personalidades para destacar otros aspectos de los personajes o otras tramas de más relevancia.

Lo que despunta en esta película es la interpretación de Stiles que, sin tener un personaje de potente dramatismo, logra una presencia interesante y un carisma singular (como es habitual en ella cuando hace cine adolescente). Pero también sorprenden el resto de intérpretes, todos muy naturales y sugestivos. Destacan los personajes de Chenille, Malakai y Derek. Este último interpretado por Sean Patrick Thomas que hará de interés romántico, cimentando a un personaje que es popular, buena gente, tierno y siempre dispuesto a ayudar. Sorprende que el actor no solo esté a la altura de su pareja en la ficción sino que además logre camelar todavía más que ella transmitiendo miradas increíbles de enamoramiento.

Y, aunque la pareja tampoco tenga una química arrolladora, no molestan juntos y su disimulado romance capta un extraño interés debido a una buena elaboración de sus personajes tan iguales como diferentes que forman una combinación encantadora.

La realización es algo típica, se centra en mucho plano cerrado y plano contraplano (algo acertado ya que hay buenas actuaciones), pero nunca incomoda. La música de la cinta no destaca, ni su fotografía, ni los bailes tampoco (se nota que Stiles no es precisamente bailarina profesional). Pero las interpretaciones, y una trama con diálogos que no avergüenzan y que se desarrolla a un ritmo perfecto e interesante basta para dar un producto adolescente digno, donde hay amistades en la cuerda floja, momentos de interesante tensión en el getto, "marchuqui" en el barrio hip-hopero, romance sutil y peleas de bandas. En todo momento hay ansias por ver el progreso de una historia en la que todo está conectado y un interés por ver en que desembocan los tal vez previsibles avatares de estos personajes adolescentes.

Lo cierto es que acaba siendo una cinta muy agradable, bien hecha, cercana, con interpretaciones dignas y un romance interesante. Sin llegar a hacer reir o llorar, da lo que promete con más dignidad de los esperado... y eso a día de hoy en el cine adolescente no es algo a ningunear.

Lo mejor: ...
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Spark
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