En cuanto empecé a verla, supe que, por muy comedia que fuera, me deprimiría. Me pasé la película entera pensando en la muerte, en lo que cuesta superar la muerte, en lo horrible que sería que me pasara lo que le pasó a la chica... no, señores, no me divertí. Ni siquiera lo pasé bien. Los momentos en que logré sonreír, fueron sonrisas amargadas. Total, que de la comedia dramática yo me quedé atascada en la parte del drama y de ahí no pasé.

No me van las cosas lacrimógenas, porque para eso ya está la vida, así que paso de que una película se regodee así en el proceso de duelo de alguien. Puede que el film sea realista, puede que no, yo no lo sé.

Sólo les digo que, si no les gusta pensar en la potencial muerte de sus seres queridos, no la vean, porque de eso va la película; véanla sólo si tienen superado ese tema o si son personas zen que no piensan en el mañana y en lo que podría o no podría suceder.

Le pongo un 5 porque no está mal hecha y tiene sus momentos de buena calidad, además de interesantes interpretaciones; que no me haya gustado a mí no significa que sea mala (si tuviera que puntuar lo que me sale del alma, le pondría un 1).