Dane DeHaan es el principal error de esta nueva aportación visual del gran Luc Besson. Si no fuese por esa mala elección la película habría sido de 10 (o por lo menos de 9).
No iba yo con demasiado interés porque Besson te puede ofrecer una obra maestra como EL GRAN AZUL o LEON, EL PROFESIONAL o una obra menor como la saga TRANSPORTER. Tanto unas como otras han sabido encaramarse en las taquillas y en esta parece no haberlo conseguido y, a mi modo de ver, la mala elección del protagonista ha influido en esos resultados.
Yo he disfrutado más que con AVATAR, que en cine de ciencia ficción me parecía lo máximo, y que en muchas de la saga de STAR WARS y se que algunos pueden considerar esta apreciación una herejía. Los actores de fuste como Hawke o Goodman o el mismísimo Rutger Hauer parecen estar casi de cameo con frase pero le dan a la película un tono de homenaje que se agradece.
Esperaba muy poco y me he encontrado con dos horas de bellísimo entretenimiento con un gran mensaje y una nota de positivismo que la hacen disfrutable por todo tipo de público...desde el de cine de autor hasta el palomitero de domingo tarde.
En fin...una grata sorpresa a pesar del blandengue DeHaan.