No me puedo creer que aún no hubiera visto este clasicazo de mi adorado Hitchcock. Había dirigido una versión de la misma historia en 1934 con Peter Lorre haciendo de villano, que es quizá lo ÚNICO que hecho de menos en este remake.

Ésta se me barrunta la más exótica del director porque el primer tercio tiene lugar en Marruecos. Es la película familiar perfecta debido a su humor, y sin embargo es muy bestia porque tiene asesinatos y todo gira alrededor del secuestro de un niño por parte de un malvado que se hace pasar por cura. La famosa canción "Que será, será" se compuso para esta película, y ganó el óscar por ello. Y la secuencia de la ópera, que había visto referenciada en otros lugares y no sabía que provenía de esta película, es más que excelente, memorable, perfecta, y me recuerda que Hitchcock empezó en trabajando en el cine mudo.

La querré ver muchas veces más.