Una divertida noche de juegos en la que se pone una propuesta más emocionante sobre la mesa, pero cuando el juego y una posible amenaza real se mezclan estalla una propuesta bastante divertida en que nunca se sabrá si lo que está ocurriendo es real o es parte de un juego.
La película está llena de situaciones entretenidas, piques y sobre todo algunas escenas muy bien rodadas. Hay una secuencia con un huevo y una perspectiva de cámara dinámica que es una absoluta pasada, destacando el buen hacer audiovisual y estando muy bien dirigida.
El sonido no destaca, pero cumple.
Los efectos especiales no abundan, pero son suficientes para que se sienta auténtica la acción, todo se siente tan auténtico como lo sea para los protagonistas que lo estén viviendo... eso hace que se sienta inmersiva.
La trama está bien, algo simple pero con el mareo entre si las cosas son parte de un juego o ser reales... pues como que hasta lo que en principio resultaría una trama muy simple se complica de maneras muy divertidas y da juego a lo largo de todo el metraje.
El ritmo de la película está bien, no se toma prisas pero es dinámico y logra atrapar hasta el desenlace sin dejar de entretener al espectador.

Es muy disfrutable y, aunque no es la primera película de este tipo, podemos decir que es lo bastante sólida y está lo bastante bien ejecutada como para sentirse ciertamente fresca.