Recuerdo cuando empecé a ver esta serie, hace un par de veranos. Ya llevaba tiempo en antena pero nunca me había generado interés. Mi madre empezó a verla ya avanzada y un verano en el que me aburría la vi viendo episodios repetidos de las primeras temporadas que hacían a media tarde. Le había dado por ver cómo había empezado todo y yo me dije, "pues veré a ver de qué va".
Me encontré con una historia bastante agradable de ver, por el contexto rural tan nuestro en el que se basa, con una serie de personajes que representan arquetipos conocidos que aún pueden encontrarse en algunos pueblos de nuestra tierra. Los actores cumplen bien con su cometido, haciendose querer u odiar según convenga a su personaje (el que mejor me cae es el alcalde). Había una trama principal (el romance entre el hijo del labrador y la hija del terrateniente, una especie de Romeo y Julieta a la valenciana) conducida con corrección y una miríada de tramas paralelas, a veces cómicas y a veces dramáticas, que componen entre todas un argumento eficaz que logra mantener el interés en el espectador, pues cuando una trama decae no tienen más que darle más descanso potenciando otras.

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