Por desgracia caí en la recomendación de algunos frikis de un foro que la ponían como "la mejor serie de la historia del anime". En fin... al lío.

La serie es toda una revelación para los que amen el surrealismo y la sucesión de situaciones irracionales que terminan haciendo absurdos a los propios personajes. Para los mortales que no tengan la neurona surrealista adolescente encendida, no la recomiendo ni aunque te paguen por verla.

En algunos momento parece una divertida crítica de la adolescencia, del despertar sexual y las emociones adolescentes. Parece que quiere "arrancar" por ahí, pero el guionista pierde tanto el enfoque con la realidad que al final no va por ahí, sino que termina por no decir nada ni explicar absolutamente nada. La serie empieza sin explicar nada y termina exactamente igual. De hecho, se lleva el interés que su personaje principal había despertado en un principio. Todo se queda a las puertas de ofrecer algo interesante que al final no ofrece. Sólo se ve la incapacidad del director y guionista de hacer de esto algo masticable. Un surrealismo muy a lo "japonés", pero en mi opinión completamente desaprovechado y caótico que me ha llevado al aburrimiento. El surrealismo debe tener un hilo conductor racional para que el surrealismo pueda tener su "porqué". Aquí eso no sucede. Y si entramos en la calidad técnica de la propuesta... no es que sea mala, pero tampoco es para tirar cohetes.

En resumidas cuentas... surrealismo japonés sin sentido, una mayúscula tontería sólo apta para mega-snobs del manga.