Aún estoy medio flipando con lo que he visto en esta película. Esta delirante película que parte de un punto de partida que huele a telefilm (mujer que se tiene que quedar con la hija de su hermana que está más drogada que Drew Barrymore en su bonita infancia). Y por supuesto después vuelve a por ella. Pero me meten de por medio al demonio, a dios y a esas cosas que siempre son tan poco creibles.

El guión ciertamente me ha dejado alucinando. Porque algunas escenas me dejan en estado de shock (ese Sewell diciendo a la niña que se tire desde una azotea para ver si Dios la salva.............). Quizá la idea no es del todo mala, da para una película entretenida, pero me ponen las visiones esa de la Basinger y un montón de cosas inutiles e irritantes de por medio que la hacen empeorar y mucho.

Y para una de las pocas veces que más o menos Rufus Sewell me parece que está medio decente y los demás no me gustan. Kim Basinger realiza un papel realmente malo y el Jimmy Smits este no aporta nada. Luego dos de los actores más conocidos de la cinta están malgastados en dos papeles absurdos. Me refiero a Christina Ricci y a Ian Holm. Porque Holm apenás sale en una escena y en un personaje que no es importante. Para eso se coge a otro actor menos conocido. Y la señorita Ricci le toca lidiar con otro personaje inutil en la película. La niña por lo menos no es irritante y la hermana drogata cumple en su papel. ¡¡Ahh!! sí, la niñera me recordo a esa Mia Farrow en el remake de "La profecía". Vamos, que da más risa que miedo.

Me parece una película totalmente absurda en la que aún me estoy preguntando unas cuantas cosas pese a la sencillez de su propuesta pero es que algunas escenitas tienen tela. Supongo que dentro de unos veinte años estaré dispuesto y preparado mentalmente para intentar volver a soportarla. Vamos a ver si lo consigo.