Buen film coproducido entre Francia e Italia, que supone uno de los primeros "polares" franceses, género que tanto nos gusta a muchos y a otro/as no tanto por su frialdad expositiva.
En esta ocasión sucede casi lo mismo, pero aunque la apariencia formal sea de tranquilidad, elegancia y formalismo, dentro de los personajes existe una fuerte pulsión dramática a consecuencia de unos hechos que casi ninguno logra dominar, estando expuestos a los designios de las casualidades y carambolas fatídicas.
Buen plantel estelar, cortos y fluidos diálogos y un aspecto visual impecable gracias a la estupenda fotografía en blanco y negro a cargo de Claude Renoir.
Quizás un pelo larga para lo que cuenta, en efecto, se da mucha importancia, como en todo polar que se precie, a los mínimos detalles.
Interesante y amena aunque de ritmo suave, sin estridencias.

https://filmsencajatonta.blogspot.com/