Una de las primeras apariciones en el cine del mítico personaje Ursus y quizás de los mejores. Claro, estaba fresco el personaje así como los principios de Maciste o Hércules, por poner los ejemplos más conocidos. Más tarde iría decayendo este tipo de cine, bien porque el gusto de los espectadores iba cambiando por un cine más realista, bien porque, como ocurriría con el western europeo, la parodia y el cachondeo se apoderaría del género hasta hacerlo irrisorio.
Su argumento no es nada del otro jueves, todas las situaciones están concebidas para mostrar la fuerza simpar del héroe y no da mucho más de sí. Pero el empaque técnico es bueno, con excelente fotografía de Carlo Bellero y entusiastas interpretaciones, más físicas que dramáticas, claro.
Grata presencia de la bella Gloria Milland, una de las actrices de las que estaba enamorado platónicamente de niño.
No tiene mucha más historia la peli pero si se la ve sin complejos se puede disfrutar.

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