Spike Lee es todo un amante del baloncesto, fan incondicional de los New York Knicks pero aun así el talento de Kobe le sobrepasa, es posiblemente este amor por el juego y el carácter de Kobe Bryant lo que le ha llevado a realizar este documental.
Muestra los rituales del jugador antes de un partido, la contundencia con la que juega y la seguridad con la que realiza cada movimiento sobre la tarima.
Te muestra como el jugador de Washington se preocupa por cada acción de sus compañeros y trata de que todo salga a pedir de boca en los minutos de juego y solo por eso es el mejor.
Es un documental muy interesante ya que nos muestra como se viven los partidos en la NBA y la magia de la mejor liga del Mundo, muy recomendable para los amantes del deporte en general.