Escandalosa en su estreno por su temática, es evidente que hoy ya no causa el mismo efecto. Tal vez porque ya estamos saturados de todo, tantos “Hostel”, “Saw”, “Matanzas de Texas”... nos deshumanizan cuando revisionamos películas que en su momento causaron polémica. “A la caza” sigue sin embargo siendo una película diferente, si algo consiguió Friedkin fue otorgar un look malsano, más asfixiante que explícito. La trama revela en su desarrollo los fantasmas del policía que interpreta con absoluta mesura Al Pacino, que se introduce tanto en su papel que los fantasmas de ese submundo no tardarán en acosarle. Sin ser una obra maestra, consigue muchos de los objetivos que otras películas de género son incapaces de alcanzar, te atrapa desde su inicio y logra desplegar un abanico de sentimientos en torno a la figura del policía y su relación de pareja. Un film digno, que ofrece uno de los títulos más interesantes de la filmografía de Friedkin.