Sin duda, transitar por el difícilmente localizable mundo de los cortometrajes, mediometrajes y cine de animación para adultos es complicado. Gracias a Movistar + accedes, a veces, a este tipo de cine, cine que se ve desterrado de las salas en este país, tan poco dado a arriesgar y que sólo, a veces, puede encontrarse en festivales que buscan especializarse, como el de Alcalá de Henares. El caso es que esta pequeña joya canadiense te atrapa con un concepto de la narración que nos retrotrae al cine noir o a películas como El Crepúsculo de los Dioses. Sin duda, el ritmo narrativo, la voz en off y la historia de un perdedor son dignos de una película. Los dibujos, en este caso, son lo de menos, igual que la animación, quizás algo demasiado básica. Todo queda a las órdenes de la historia y de esa magnética voz que nos va contando la historia de un perdedor. Muy notable, de veras.