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Voto de Luis Guillermo Cardona:
8
Drama. Romance Adaptación de la novela "Grandes esperanzas" de Charles Dickens. El hijo de un humilde herrero es enviado a educarse a Londres gracias al dinero de un benefactor cuya identidad desconoce. (FILMAFFINITY)
6 de septiembre de 2010
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Charles Dickens (1812-1870) fue un contundente maestro de la narrativa y uno de los más atinados críticos sociales que nos haya brindado la literatura inglesa (la desigualdad social, el maltrato a las prostitutas, la infamia penitenciaria y la pena de muerte, fueron algunos de sus más feroces blancos). Dickens fue el hombre que inspiró la eficiente edición cinematográfica que aplicó David W. Griffith, y como autor, dejó un legado que figurará por siempre en los catálogos de las librerías: “Oliver Twist”, “Canción de navidad”, “David Copperfield”, “Historia de dos ciudades”… y “Grandes esperanzas”.

Llevada numerosas veces al cine, como sus más famosas novelas, quizás sea esta versión del director David Lean, la mejor adaptación que se haya hecho de “Grandes esperanzas”. La historia arranca con el encuentro entre el pequeño Philip Pirrip -“Pip” por siempre y para siempre- con el fugitivo Magwitch, quien amenaza al chico para que éste le traiga comida y le facilite una lima para safarse de sus cadenas. El comportamiento del pequeño cuando la policía lo recaptura, hace que Magwitch actúe lealmente con él, pero, el encuentro del chico con la, tan bella como engreída, Estella, y con la anclada en el tiempo, Miss Havisham, deja de lado el episodio con el anciano fugitivo y comenzará un difícil romance que lo hará víctima de una curiosa venganza.

Diversos y separados destinos se entrecruzarán luego, y el juego de la vida nos muestra sus facetas y la sabia manera como hila las redes que tejen las historias, hasta dejar contada una bella experiencia, que ha de trascender cualquier tiempo y lugar por su espíritu humano y su labor edificante. El virtuosismo literario de Dickens, con su mesurado humor, su gótica ambientación para recrear el drama, y su constante crítica a la sociedad victoriana, se compagina muy eficazmente con el estilo visual de David Lean, el cual se luce con su eficaz composición escenográfica y con esa iluminación cuidada hasta en el más mínimo detalle.

Una muy joven Jean Simmons, impacta ya con su fina belleza, y llega a extrañarse cuando otra actriz entra a reemplazarla, para dar cuenta del transcurrir de los años en que ha abandonado su engreimiento dando paso a una mujer más serena y madura. Finlay Currie es otro actor que impacta con su recia y sorprendente personalidad, y como Magwitch, resulta tan eficaz como ya lo fuera en “Murmullos de la ciudad”. Finalmente, Martita Hunt, como Miss Havisham, pone otro punto en alto con su excéntrico personaje, anclado en el momento preciso en que su adorado novio dejó de asistir a la boda.

“CADENAS ROTAS” es Dickens y es Lean, dos nombres inmortales legados por los ingleses.

Título para Latinoamérica: “GRANDES ILUSIONES”
Luis Guillermo Cardona
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