La novela de Juan Marsé (autor de “Ültimas Tardes con Teresa” y “La Muchacha de las Bragas de Oro”) era idónea para ser adaptada en unos tiempos en que el post-franquismo era evidente en el si de la sociedad, y en general, a la barcelonesa que era partícipe de unos cambios, no sin embargo, en la moralidad enclaustrada de las decisivas familias burguesas.

El catalán Jordi Cadena (Barcelona Sur; la Señora) contó con la participación de actores que, militantemente, se comprometían a actuar en films que abordaban temas tabúes ya fuesen políticos o sociales, como Xabier Elorriaga (La Ciudad Quemada; la Fuga de Segovia) o el cantautor valenciano Ovidi Montllor. Pero la protagonista es sin duda Ana Belén como la prima Montse Claramunt del título, cuyo papel hace tambalear el si de una familia que se exterioriza su identidad conservadora pero que oculta sus secretos más oscuros como los juegos entre ellos, especialmente y la otra prima, Nuria (Christa Leem).

Pero el escándalo se produce cuando Montse redimida como una asistente social se enamora de un preso (Gabriel Renom) con quien se cita en una pensión en el casco antiguo de la ciudad (lejos de esa acogedora Barcelona alta sonde reside su verdadera familia que se va de fin de semana en las costas del Garraf).

La película s caracteriza por los desnudos integrales de Ana Belén y otras secundarias femeninas, estas vinculadas a la moda del destape, como Christa Leem (Las Alegres Chicas de El Molino) y Mirta Miller (La Lozana Andaluza). La película acusa de unos diálogos condensados (mostrando unos antes y después de los hechos que pueden llegar a confundir).