Hay series que mejoran después de su temporada inicial. Y este es el caso de New Girl, que tras un primer año prometedor pero ciertamente dubitativo, nos ha entregado una segunda parte de alto nivel. El modo que tiene esta serie de crear ingenio y comicidad no se basa ni en un guión brillante (caso de The Big Bang Theory, por ejemplo) ni en la apuesta por innovaciones narrativas (aquí Community se lleva la palma), sino en la naturalidad y saber hacer de unos actores estupendos, empezando por supuesto por la irresistible protagonista que copa la mayor parte de los comentarios en esta página (y también fuera de ella). Pero los otros tres también están fantásticos.

Creo que hay que reconocerle a New Girl su capacidad para asentarse y para crecer en esta segunda temporada, algo muy complicado. Es por eso por lo que escribo esta crítica, ya que las anteriores reseñas son referidas sólo a la primera temporada y eso contribuye a que en general no sean excesivamente positivas. Aunque no esté a la altura de las mejores (quizás siga mejorando...), esta serie merece algo más que el 6,6 que ahora tiene en Filmaffinity.