Haz click aquí para copiar la URL
España España · bilbao
Voto de ernesto:
6
Thriller. Intriga. Drama. Fantástico Diego es un médico acostumbrado a manejar situaciones límite, que se ha inmunizado ante el dolor ajeno. El intento de suicidio de Sara, una de sus pacientes, provocará que el compañero sentimental de ésta señale al médico como responsable directo de lo ocurrido durante un amenazante encuentro. Horas después, Diego sólo recuerda el ruido de un disparo, y la extraña sensación de haber recibido algo más que un encargo durante este incidente... (FILMAFFINITY) [+]
5 de septiembre de 2011
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
En los últimos en el cine español han despuntado algunos thrillers de carácter fantástico, que van desde el terror a lo sobrenatural. Con una puesta en escena sofisticada y argumentos que buscan los giros de guión inesperados, estas películas de género han servido para dar un aire nuevo y exitoso a una cinematografía en la que historias así no abundaban. Los otros, El orfanato y Los ojos de Julia, mejores o peores, son películas que han tenido bastante éxito y repercusión. En esa línea se puede inscribir también la película El mal ajeno, debut del director Oskar Santos. Y aunque argumentalmente se distancia bastante de las que he mencionado antes, la película responde a unos criterios artísticos y comerciales bastante similares.
El protagonismo de El mal ajeno recae en un médico joven que trabaja en una unidad para aliviar el dolor a pacientes que viven en circunstancias que, sin esos tratamientos, serían casi insoportables. Un día una de sus pacientes acude al hospital tras un intento de suicidio, acompañada por un hombre que dice ser su marido. Su salud no deja de empeorar sin que nada se puedsa hacer por ella. Hasta que su marido se suicida después de tener un enfrentamiento con el médico. A partir de ese momento la vida del médico cambia por completo.
El mal ajeno es de esas películas de las que no conviene dar ni un solo detalle más sobre su argumento porque lo interesante de la película es ir descubriendo el misterio que va a rodear al doctor a partir de ese momento.
La idea que envuelve el misterio que da lugar a la historia es realmente atractiva, y es más que suficiente para mantener el interés de la película hasta el final. Incluso la forma en que se resuelve está a la altura del planteamiento. Pero hay un problema, y es que esa idea que planteada sobre un papel es francamente poderosa, no mantiene esa capacidad de fascinación en su traslación a la pantalla.
La puesta en escena del director es estilizada y visualmente atractiva, pero tal vez demasiado fría para tratar sobre una historia habla de sensaciones tan profundas. Y desde el guión no terminan de cuajar algunos de los personajes, como el que interpreta Belén Rueda, cuya presencia no termina de fluir dentro de la historia.
Pero tal vez el mayor problema de la película venga, y me fastidia decirlo, de su protagonista. Eduardo Noriega tiene uno de los papeles más interesantes que le han caído en suerte, junto con el de Abre los ojos, y la verdad es que no sabe muy bien que hacer con él. Ya su caracterización, con esas innecesarias canas, chirría un poco, pero además el es incapaz de transmitir el miedo, el desconcierto y finalmente la determinación del personaje. Es habitual decir, injustamente, de él que es blando y sin carácter, pero en esta ocasión sí que se queda a medio gas.
El mal ajeno acaba siendo un película sugestiva pero que no termina de aprovechar las grandes posibilidades de su historia. En cualquier caso hay que seguir la pista a Oskar Santos, su director.
ernesto
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow