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España España · almeria
Voto de TOM REGAN:
7
Ciencia ficción Una chica de un pueblo pequeño, que sufre ansiedad social, se muda a una gran ciudad futurista con su madre. Expuesta por primera vez a la obsesión de la sociedad urbana con la seguridad y la prevención del terrorismo, no pasa mucho tiempo antes de que sus días en el colegio se llenen de miedo y paranoia. Pronto encuentra orientación y compañía en el lugar más inesperado. Adaptación de una historia corta de Philip K. Dick. (FILMAFFINITY) [+]
6 de septiembre de 2020
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
297/06(05/09/20) Muy entretenido episodio basado muy libremente en el relato corto de ciencia ficción "Foster, You're Dead!" del escritor estadounidense Philip K. Dick (al que se dedica la serie), publicado por primera vez en "Star Science Fiction Stories" nº 3 en 1955 adaptado por Kalen Egan (“El hombre en el castillo”) y Travis Sentell, siendo el material de origen una sátira de dos tendencias de la década de 1950: el consumismo y la creciente ansiedad de la Guerra Fría. Dick escribió en una carta: "Un día vi un titular de periódico que informaba que el presidente sugería que si los estadounidenses tuvieran que comprar sus refugios antiaéreos, en lugar de que el gobierno los proporcionara, los cuidarían mejor, una idea lo que me puso furioso. Lógicamente, cada uno de nosotros debería tener un submarino, un caza a reacción, etc.". En este caso se altera ‘el refugio’ por unas pulseras con inteligencia artificial (¿?), situándonos en un futuro distópico basado en la premisa de que el Gran Hermano vigila todos tus movimientos (mediante una pulsera llamada Dex) sabiendo a la perfección cómo manipularte para lograr su oscuro fin, los que no llevan este dispositivo son vistos como amenazas y son marginados. Abordando con ingenio (pero sin aportar nada nuevo a la idea) como los gobiernos se pueden aprovechar de los miedos de la sociedad, creada por los propios gobiernos en campañas manipuladas, para con sus métodos de ‘seguridad’ intrusivos llegar a controlarnos mejor. Como los abusos de los gerifaltes pueden llegar a surtirse de nuestras paranoias para lavarnos el cerebro. Siendo este el capítulo de la serie que más se parece a la serie que venía a sustituir del canal Channel4, me refiero a “Black Mirror”, en el sentido de como la tecnología puede ser usada de modo torticero por los mandamases.

En este futuro, los EE. UU. vive dividido en dos partes:
- Ciudades: Sitios "seguros" ultra-tecnológicos cuyos líderes han elegido una supuesta "seguridad" totalmente alimentada con control social y una constante búsqueda paranoica de terroristas.
- Burbujas: Zonas alejadas de las ciudades, son reductos que se niegan a estar vigilados y en las cuales las tecnologías invasoras son rechazadas.

En su inicio podemos sentir la estratificación de este futuro donde las grandes ciudades, cual urbes medievales, posee controles de entrada a modo de puertas de entrada en las murallas, donde debes acreditar ser ´legal’ para pasar a sus ‘comodidades’. Una vez dentro entramos en como los colegios pueden convertirse en nidos de perversión de las mentes, de cómo no querer ser apartados puede hacer que los jóvenes con personalidad aun por formar sean maleables, aunque en este sentido el comportamiento de la protagonista Foster (buena Annalise Basso) me resulta un tanto arbitrario en el modo de comportarse con el alumno Kaveh (correcto Algee Smith), como llega a ‘vender su cuerpo’ sin dilema alguno. Esto desemboca en rebeldía contra su madre, en engaños, escenificando el enfrentamiento entre la educación materna y la ‘autodidacta’ del centro escolar donde se relaciona con gente de su edad, casi siempre suele ganar la de sus coetáneos. Cuando el dispositivo DEX (voz de Connor Paolo)entra en acción la intriga y el suspense entran en acción, jugando con la percepción del espectador, con sus dudas sobre si le está ayudando o manejando, e incluso si todo puede ser obra de su propio desvarío mental. Llevándonos a un rush final inquietante y atractivo, con un giro final (al menos por mi parte) que no me ha sorprendido demasiado. Dejando al final un regusto desesperanzador.

Su minutaje se me ha hecho un episodio que engancha, posee un ágil ritmo, con momentos de tensión bien llevados, con una puesta en escena notable, con un espléndido diseño de producción de Julie Berghoff (“Expediente Warren”) creando un mundo futuro con efluvios a cercano, ello en miscelánea con unos muy creíbles efectos especiales coordinados Ryan Steinhouse (serie “Fargo”), creando un fabuloso sky line de rascacielos infinitos, con las sobreimpresiones interactivas al modo “Minority Report” (relato también de Philip K. Dick, del que también la idea de detener a personas que aún no saben que van a delinquir, el pre-crimen). Todo esto punteado por la música de Mark Isham (“Crash).

En su debe mencionar que no sé qué pinta el personaje de la Milena (Alice Lee), parece va a tener importancia y solo es un apósito sin más. Solo parece estar ahí para que veamos que las bibliotecas físicas con sus estanterías y libros van a quedarse en el futuro en piezas de arqueología.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
TOM REGAN
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