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Voto de Alvaro Zamora Cubillo:
5
Drama Tras recuperar su visión, un hombre se mantiene metafóricamente ciego al estar obsesionado con lo superficial. (FILMAFFINITY)
17 de julio de 2018
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Terminando de ver “The Ticket” (2016) de Ido Fluk con Dan Stevens, Malin Akerman, Kerry Bishé, Oliver Platt, Peter Mark Kendall, Liza J. Bennett, entre otros. Drama de fantasía sobre un hombre que tras recuperar su visión, se mantiene metafóricamente ciego al estar obsesionado con lo superficial. El título es una metáfora sobre aquellos que “rezan para ganar la lotería, pero nunca compran el tiquete” y eso es lo más extraño del guión, que intenta funcionar en la vertiente psicológica al sacar a la luz los demonios interiores del mundo consumista, capitalista, y sobre la fácil corruptibilidad de los ideales. Técnicamente el filme es bueno con las imágenes extrañas y difusas, el tratamiento del color, el contraste y la nitidez, pero no es original, ya que recuerda mucho a la estética de “Le Scaphandre et Le Papillon” (2007); además que el metraje se hace demasiado largo desde el inicio de créditos, al tiempo que se desconoce el trasfondo psicológico e íntimo pasado del protagonista; que por cierto, la producción fue hecha para el lucimiento exclusivo de Dan Stevens en papeles de profundidad emocional, y como eje absoluto de la trama, es destacable por mostrar su transformación física y psicológica al descubrir ese “nuevo mundo” que como el gran “macguffin”, NUNCA se explica satisfactoriamente. Del resto del reparto, Malin Akerman y Oliver Platt no convencen mucho en sus papeles, la primera más como un florero que solo se activa con Stevens en pantalla, y el otro con más peso, pero igual sin profundidad, ambos son las víctimas familiar y amistosa del protagonista; y de todo por el peso de la ambición, junto a un tufo religioso inexplicable muy metido a calzador; porque el razonamiento científico “que un tumor hipofisario inoperable que había estado presionando sus nervios ópticos desde que era un adolescente, se ha reducido milagrosamente…” no es suficiente para que se recupere en la edad adulta, sin seguimiento médico, “de celebridad” si se quiere por los tiempos que corren, y nada de eso es explorado; por lo que la trama se decanta en aquello que “no tenido y adquirido, cambia toda la perspectiva” pero desarrollado de una manera tan lenta y previsible, que se hace aburrida, al tiempo que el sonido no ayuda mucho, pues no se capta muy bien las palabras. Con todo, esta es una crítica a la moral, la superficialidad, el dinero, el poder, el consumismo, el capitalismo, la amistad, la fidelidad, el amor, la religión, la virtud de la sencillez y la humildad; y como decía el escritor portugués José Saramago: “Creo que no nos quedamos ciegos, creo que estamos ciegos, ciegos que ven, ciegos que, viendo, no ven”
NO RECOMENDADA.
NO tendrá nota en Lecturas Cinematográficas
http://lecturascinematograficas.blogspot.com/
Alvaro Zamora Cubillo
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