Haz click aquí para copiar la URL
España España · Madrid
Voto de Canchado:
5
Western El sheriff Robert mata por accidente al hijo de uno de los pistoleros de la ciudad. Ante tal escándalo, el pistolero intentará vengarse raptando así al hijo del sheriff. (FILMAFFINITY)
14 de octubre de 2020
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
En mi repaso por el western europeo he recalado en esta ópera prima de Rafael R. Marchent y sobre la que tengo sentimientos encontrados.

Me ha sorprendido enormemente la buena factura técnica de la película, sobre todo teniendo en cuenta que se trata no solo de la primera incursión de Marchent en el género, sino de su primera obra como director (es cierto que ya se había curtido en el mundillo ejerciendo otras funciones como actor, escritor o segunda unidad de dirección), sorprenden los encuadres, la forma de mover la cámara y en definitiva, su buen pulso a la hora de dirigir; sin embargo, creo que hay un problema de base en el guion, porque transita entre dos aguas al establecer dos planos narrativos independientes entre sí.

La película tiene un arranque muy fuerte con la muerte accidental de un bebé en primer plano. Esta secuencia sirve para introducir en apenas unos minutos a los protagonistas que sustentan casi la totalidad del peso dramático de la acción. Tras una elipsis post-creditos se continúa la historia unos años después y hacen acto de presencia unos personajes que no tienen nada que ver con lo anterior, que ni van ni vienen porque en el conjunto del relato aportan entre poco y nada y que sólo sirven para desarrollar de un modo forzado el conflicto interno del protagonista, que ha decidido abandonar la vida de violencia a la que se ve abocado. En este punto se establece una especie de "subtrama" que es entretenida y nos regala algunos de los mejores momentos del film, el problema aquí es su nulo aporte para justificar la vuelta a la violencia del protagonista. Si bien la idea es mostrarnos cómo unos matones de poca monta enturbian la apacible vida del pueblo empujando a una persona que intenta ser pacifica hacia una forma de vida que ha dejado atrás, el detonante real aquí es su hijo y vista en su conjunto, la importancia de esta segunda trama se queda en nada. Marchent demuestra cierta torpeza al navegar entre ambas tramas porque se abandona casi totalmente la principal en detrimento de esta otra trama secundaria que sigue derroteros más tradicionales y la principal no se retoma de una forma clara hasta prácticamente el final de la película. Entre medias habremos pasado por un detonante falso y un falso clímax (el tiroteo en el rancho con el personaje interpretado por Guardiola), que hacen que la película se resienta y dé la impresión de ser más larga de lo que en realidad es. Para el final (el de verdad) nos espera un desenlace rápido, muy bien resuelto, con uno de esos grandes planos generales que empequeñecen a los personajes frente al conjunto, engrandeciendo la acción.

Como opera prima cumple sobradamente y da muestras de una técnica ya muy depurada, pero a nivel narrativo podría haber sido mucho mejor de haberse centrado en la trama principal, que no solo es más interesante por su enorme carga dramática, sino que tiene mucho más potencial. Aquí todavía hay margen de mejora y en apenas dos años alumbrará obras redondas casi sin fisuras como "Dos Cruces en Danger Pass" o "¿Quién grita Venganza?".
Canchado
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow