Película biográfica que trata de mostrar de modo objetivo y en lenguaje documental la vida de uno de los seres más atroces de la historia de la humanidad.
Habrá que destacar la actuación de Joseph Olita en el papel principal, actuación en la que se basó Forest Whitaker para extraer elementos imprescindibles de la personalidad de Idi Amin en “El último rey de Escocia”.

Dentro de la cadena de dictadores africanos, Amin es con toda seguridad el más sanguinario y cruel de todos, hasta el extremo de poseer innumerables rumores (algunos de ellos documentados) acerca de su canibalismo, en algunos textos se describen refrigeradores donde el dictador guardaba sesos humanos.

Amin hizo muchas conexiones con el mundo árabe del cual recibió ayuda económica, apoyó la causa Palestina y despreció la judía, era un fervoroso admirador de Hitler y lo decía públicamente con total desparpajo.
Si tan sólo hubiese sabido que Hitler no solamente odiaba a los judíos, odiaba a los No-Arios con un irracional y desmedido resentimiento hacia el pueblo hebreo. En alguno de sus encolerizados discursos ante miembros del partido Nacional Socialista Alemán sentenció: “Preferiría que hoy estuvieran cien negros, a que un solo judío se infiltrase entre nosotros”, probablemente Amin no hubiese durado 5 minutos ante su “mentor” germano.

Y que se puede esperar de un dictador militar analfabeto (perdón por el pleonasmo), que además fue boxeador; simplemente un enorme déficit de neuronas y un superávit de violencia, estupidez e injusticia.
Dr.Juventus