Es intimista, relajada y divertida. Juega con la ruptura de la tercera pared poniendo a los personajes a hablarle a la cámara como si fuera un documental, y el tono resultante es interesante porque los protagonistas a su vez trabajan haciendo grabaciones, entonces es un poco como un reality dentro de un documental, dentro de una serie.

Es un productor novato -Kim Soo Hyun- que inicia como empleado de una cadena de televisión (KBS) y cómo va asimilando su contexto de trabajo y la relación con su compañeros y superiores. Es inteligente, racional y un poco infantil, esto último está reflejado en sus pequeñas venganzas cuando le molesta algo de alguien.

Son una productora de un programa musical -Kong Hyo Jin-, que trata de mantener su carácter fuerte y cree que es buena leyendo las emociones de los otros cuando en realidad es un poco torpe al respecto, y un productor que enfrenta la amenaza de que su programa sea cancelado por bajo rating -Cha Tae Hyun-, mientras trata de cuidar de su equipo de trabajo de la mejor manera. Ambos son amigos desde la infancia.

Y es una joven y muy popular cantante -Iu- que tiene fama de insensible y grosera, y cuya directora de agencia es manipuladora y explotadora.

Los personajes se van abriendo y desarrollando frente a la cámara: cuando la cámara los sigue y ellos le hablan cuál harían en un documental y cuando la cámara los espía como es lo normal en una serie. De a poco los conocemos, nos reímos con su humor o con su mal sentido del humor y les tomamos algo de afecto.

En general los personajes son sujetos normales, agradables, pero imperfectos, molestos a veces, nobles y luchadores otras, como alguien que podrías cruzarte en el trabajo o en la universidad o en el barrio o en la familia. Salvo la directora de la agencia de la artista, ella es mala sangre realmente, aunque es una maldad y avaricia que se puede encontrar en la vida real, pero como no tiene suficiente desarrollo no hay forma de entender su trasfondo más allá de ser mala.