Algo sin lo que una serie no es buena son los personajes. Y aquí los personajes son muy buenos. A lo largo de los 6 años que dura la serie todos los personajes tienen una evolución clara. Y coherente. Eso es algo muy difícil de conseguir en una serie, más cuanto más dura, y lo consiguen.

Acabé adorando a las chicas. A esa Samantha pragmática que dice verdades como puños y hace lo que le da la gana, Samantha es mi personaje favorito. A Miranda, que detrás de su máscara de cinismo es toda ternura, y a Charlotte, tan dulce que al final te contagia su eterno optimismo. Pero no a Carrie. Al principio no entendía bien porque me caía tan mal, porque Samantha y Charlotte son tan frívolas como ella y me encantan, aunque Charlotte sea tan conservadora y tan empalagosa, y Samantha tan exageradamente temerosa del compromiso. Después una amiga me dijo que me caía mal Carrie porque es abrumadoramente egoísta. Y entonces me reconcilié con ella. No ha llegado a caerme nunca bien, pero he dejado de buscarle las vueltas. Es así, y tiene que aprender a mirar a los demás para verse mejor a sí misma.

Si los cuatro personajes principales están tan bien hilados, hay que reconocer que muchos de los secundarios son brillantes, y a eso ayudan mucho los divertidos diálogos. Mi pretendiente favorito para Carrie siempre fue Big. Con ese punto infantil y abofeteable siempre presente en él, pero tenía algo que hacía que cuando aparecía el novio perfecto como Aidan, no fuera suficiente. Big tenía charm.

La serie termina en el momento que tenía que terminar, pero aún así, el final es excesivamente edulcorado y decepcionante.

Lo mejor: su valentía al poner a estos cuatro personajes en ciertas situaciones, los momentos de honestidad en las conversaciones en las que se juntan las cuatro y NY: EL PERSONAJE
Lo peor: Los continuos mensajes subliminales diciendo que no eres una mujer triunfadora si no quemas la tarjeta y te acuestas con todo lo que se menea hasta que encuentres al hombre perfecto, que muchas veces contradicen los mensajes importantes que aprenden los personajes.