La versión podemos decir hollywoodiense del más célebre patriarca hebreo, José.

A pesar de ser una producción italiana, la presencia de actores ingleses como Robert Morley encarnando a Putifar o de la hermosa Belinda Lee como la dolida esposa de éste, o Geoffrey Horne, el actor norteamericano que interpreta al mismo José, en el cine clásico tan solo esta película intentó retratar del modo más fidedigno y sintetizado la historia de éste.

Nacido como hijo de Raquel, de insuperable belleza y talento, José se erige muy pronto como el hijo predilecto de Jacob, y a consecuencia de la envidia de sus hermanos es tirado a un pozo primero, para acabar siendo vendido como esclavo, rumbo a Egipto.

Historia basada en el libro bíblico del Génesis, y en la realidad situada allá por el período hicso o en la dinastía XII del antiguo Egipto, según otros, esta película rodada sin demasiado presupuesto es sin embargo un gran acierto y aporte de la difusión de este episodio de nuestro pasado.

Realmente los que sobresale de esta película es la manera un tanto libre de concebir a algunos personajes, como el de Henet, la calumniadora esposa del bondadoso Putifar según las sagradas escrituras, pero aquí es ella la que cae bien, como una mujer joven, hermosa e incomprendida por un marido viejo, cruel e impotente, para nada se le echaría en cara que se enamorase de José, un hombre de su edad y con el que tiene mucho en común.

La imagen de seductora sin escrúpulos lo es tanto como el de una mujer amargada por las circunstancias y abandonada por todos.
Es una vuelta de tuerca, y lo mismo para el embrutecido Putifar, aquí interpretado por un Robert Morley que pone la exageración, una naturalidad exacerbada de hombre rudo y un poco ido, al igual que su interpretación de Luis XVI.
El resto del reparto pasa desapercibido, pero sus interpretaciones son mermadas, solo que como la historia está centralizada en Geoffrey Horne, apenas sobresale, hubiera estado bien que Vira Silenti hubiera salido en más escenas, su personaje fue muy bien escrito.

Película indispensable para los fans del cine bíblico.