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Voto de Zu Wolff:
8
5,1
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Drama. Bélico
Durante la Segunda Guerra Mundial, el adolescente Thomas es reclutado para luchar en el Ejército Alemán. El chico sobrevive, pero al final de la guerra su ciudad está destruida, sus padres han muerto y su amada Melanie ha sido violada y asesinada por el Ejército Soviético. Un oficial comunista se lleva a Thomas a la Unión Soviética y lo entrena para trabajar como espía del KGB. Durante la Guerra Fría, es destinado a Londres, donde ... [+]
26 de abril de 2022
5 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
El nombre correcto de la película y tal como se presentó en España es Joy Division, no sé de donde sale eso de "escuadrón letal", ni tiene relación alguna con la película; ciertamente, existe una enorme confusión en el público con lo que significa "Joy Division": literalmente, en inglés, "La División de la alegría" o "de la diversión".
El cine porno de los 70 trajo títulos como "Salón Kitty" o "Tren especial de la SS", por ejemplo, donde las fulanas, vestidas con iconografía nazi, se entregan a los malvados oficiales de las SS. La calenturienta imaginación del público inmediatamente supuso que esas perversiones, tratándose de sádicos nazis, debían ser ciertas y la leyenda urbana se consolidó, sin base real alguna, pues naturalmente, nunca existieron en la realidad.
Las Divisiones de la Alegría, de las que toma el nombre esta interesantísima película, no eran sino unas vacaciones pagadas por el Estado Alemán dirigidas a la juventud; se organizaban campamentos de verano donde los jóvenes, en contacto con la naturaleza, hacían deporte, confraternizaban y, por supuesto, recibían propaganda del régimen. Esto, y por eso la película se llama así, sale en la película cuando los protagonistas están en el cine, donde precisamente lo que ven en pantalla es uno de estos campamentos de verano juveniles, las divisiones de la diversión.
Con independencia de este error de concepto, la película en sí es la ópera prima de su director, rodada con escasos medios y con actores muy noveles. Y como en muchos casos sucede, la ópera prima resulta maravillosa. La película es extraordinaria y merece que pierdan unos segundos en leer la critica completa.
La película es dura. Claro, no puede ser de otra forma. La película es conmovedora. Y transgresora: porque contar la realidad es transgresor hoy día. Se ve una Alemania muy avanzada, casas con teléfono, baños con agua caliente, automóviles. Eso puede parecer trivial, pero no lo es: la calidad de vida estaba realmente muy avanzada, comparada con la mayoría de países, y eso no gusta reconocerlo. Ese mundo feliz, donde viven los protagonistas, es destruido por la ocupación rusa. Si, ya sé que los alemanes destruyeron antes otros países; si, ya sé que su gobierno era malvado. Pero aquí, y de ahí su realismo, se habla de Alemania, y de las barbaridades -incuestionables- que cometieron los rusos. Asesinatos en masa de civiles, violaciones sin parar. Robos. Muerte.
El protagonista es un jóven enamorado; su amor es una chica de su pueblo, de su edad. Este protagonista es interpretado por dos actores, uno en su adolescencia, otro ya siendo un hombre: ambos están soberbios en su papel. Su vida actual es ser un agente soviético, con la misión de asesinar a un colaborador británico que ha dejado de ser útil.
Los continuos flash back al pasado, lejos de confundir al espectador como otros usuarios escriben, seguramente prestaron poca atención, nos explica perfectamente la trama. Imprescindible y valiente película.
El cine porno de los 70 trajo títulos como "Salón Kitty" o "Tren especial de la SS", por ejemplo, donde las fulanas, vestidas con iconografía nazi, se entregan a los malvados oficiales de las SS. La calenturienta imaginación del público inmediatamente supuso que esas perversiones, tratándose de sádicos nazis, debían ser ciertas y la leyenda urbana se consolidó, sin base real alguna, pues naturalmente, nunca existieron en la realidad.
Las Divisiones de la Alegría, de las que toma el nombre esta interesantísima película, no eran sino unas vacaciones pagadas por el Estado Alemán dirigidas a la juventud; se organizaban campamentos de verano donde los jóvenes, en contacto con la naturaleza, hacían deporte, confraternizaban y, por supuesto, recibían propaganda del régimen. Esto, y por eso la película se llama así, sale en la película cuando los protagonistas están en el cine, donde precisamente lo que ven en pantalla es uno de estos campamentos de verano juveniles, las divisiones de la diversión.
Con independencia de este error de concepto, la película en sí es la ópera prima de su director, rodada con escasos medios y con actores muy noveles. Y como en muchos casos sucede, la ópera prima resulta maravillosa. La película es extraordinaria y merece que pierdan unos segundos en leer la critica completa.
La película es dura. Claro, no puede ser de otra forma. La película es conmovedora. Y transgresora: porque contar la realidad es transgresor hoy día. Se ve una Alemania muy avanzada, casas con teléfono, baños con agua caliente, automóviles. Eso puede parecer trivial, pero no lo es: la calidad de vida estaba realmente muy avanzada, comparada con la mayoría de países, y eso no gusta reconocerlo. Ese mundo feliz, donde viven los protagonistas, es destruido por la ocupación rusa. Si, ya sé que los alemanes destruyeron antes otros países; si, ya sé que su gobierno era malvado. Pero aquí, y de ahí su realismo, se habla de Alemania, y de las barbaridades -incuestionables- que cometieron los rusos. Asesinatos en masa de civiles, violaciones sin parar. Robos. Muerte.
El protagonista es un jóven enamorado; su amor es una chica de su pueblo, de su edad. Este protagonista es interpretado por dos actores, uno en su adolescencia, otro ya siendo un hombre: ambos están soberbios en su papel. Su vida actual es ser un agente soviético, con la misión de asesinar a un colaborador británico que ha dejado de ser útil.
Los continuos flash back al pasado, lejos de confundir al espectador como otros usuarios escriben, seguramente prestaron poca atención, nos explica perfectamente la trama. Imprescindible y valiente película.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
El adolescente, militarizado, combate contra los rusos; con pocos recursos, la cinta describe airosamente los combates y los horrores. Es extraordinario, en el cine, ver como las waffen SS liberan un pueblo alemán de los rusos, como son los salvadores y dan alimento a refugiados ¿pero, en Alemania, no era exactamente así? La realidad parece transgresora.
Los rusos asesinan y violan a mansalva; soldados y civiles huyen penosamente hacia el Oeste, perseguidos por la muerte.
El adolescente ve como, por enésima vez, violan a su amada, y por último la asesinan.
Perdido y sin familia, como es poco más que un niño, una oficial del KGB lo recoge. De ahí que se deduce que es adoctrinado en Moscú y convertido en un oficial del KGB.
El presente, en la película, es su estancia en Londres para asesinar al agente que ya no tiene valor. He aquí a la Inteligencia Británica, utilizando los mismos métodos que nazis o soviéticos. De nuevo, el juego de contrastes: impresiona ver al antiguo combatiente de 1945, escuchando a los Rolling Stones o visitando modernos pubs en la colorida década de los 60, tan cerca y a la vez tan lejos de los espantos de 1945.
El espía, finalmente, encuentra un nuevo amor y huye. La película deja bien claro que siempre será perseguido, pero hay un rayo de esperanza.
Simplemente excepcional. Hay que ser muy valiente para hacer esta película, de contrastes, de crudeza, de olvido y de esperanza. Maravillosa.
Los rusos asesinan y violan a mansalva; soldados y civiles huyen penosamente hacia el Oeste, perseguidos por la muerte.
El adolescente ve como, por enésima vez, violan a su amada, y por último la asesinan.
Perdido y sin familia, como es poco más que un niño, una oficial del KGB lo recoge. De ahí que se deduce que es adoctrinado en Moscú y convertido en un oficial del KGB.
El presente, en la película, es su estancia en Londres para asesinar al agente que ya no tiene valor. He aquí a la Inteligencia Británica, utilizando los mismos métodos que nazis o soviéticos. De nuevo, el juego de contrastes: impresiona ver al antiguo combatiente de 1945, escuchando a los Rolling Stones o visitando modernos pubs en la colorida década de los 60, tan cerca y a la vez tan lejos de los espantos de 1945.
El espía, finalmente, encuentra un nuevo amor y huye. La película deja bien claro que siempre será perseguido, pero hay un rayo de esperanza.
Simplemente excepcional. Hay que ser muy valiente para hacer esta película, de contrastes, de crudeza, de olvido y de esperanza. Maravillosa.