Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Kyrios:
5
Drama Micheaux coloca en el centro de su melodrama a una mulata que sufre el linchamiento de su familia y está a punto de ser violada por un terrateniente sureño. En realidad, la narrativa principal se ocupa de los esfuerzos de la protagonista, Sylvia, por encontrar financiación en Boston para la escuela sureña en la que trabaja. Aparte de los amoríos varios, y de una subtrama gangsteril, el núcleo de la película es el tema racial. (FILMAFFINITY) [+]
10 de diciembre de 2013
10 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
Aunque hoy parezca mentira, hubo un momento en los Estados Unidos, a principios del Siglo XX, en los que no todos los sectores de la población podían disfrutar del invento del cine del mismo modo. La comunidad afroamericana estuvo durante largo tiempo marginada de este arte, y en muchos cines se les prohibía la entrada, bajo el pretexto de que sumar a gente de color con blancos podría causar alborotos. Como los negros y los blancos no podían compartir muchas veces sala de cine (y si lo hacían los afroamericanos se quedaban con el peor horario de todos) se llegó a crear un sistema de producción y distribución paralelo, en la que se realizaban películas hechas por y para afroamericanos. Un auténtico Star System particular donde la comunidad negra podía compartir sus experiencias (en muchas ocasiones eran películas que hablaban sobre este contexto discriminatorio) a través de la cámara de cine. Directores como Oscar Micheaux, guionistas e incluso estrellas propias, como Evelyn Preer.

Oscar Micheaux, con antepasados esclavos, fue el primero que llegó a explotar este sistema, creando las primeras películas (para ser exactos, su primera película fue The Homesteader, realizada en el año 1919, aunque no conservamos ninguna copia) para la comunidad afroamericana. Fue seguramente el director más destacado, pese a que hoy en día su cine ha quedado totalmente olvidado.

En gran parte sus películas han quedado en un estado de conservación muy deteriorado (como es la propia película de Puertas adentro), y al pasar del cine sonoro al mudo, las antiguas películas silentes, quedaron desprestigiadas y fueron olvidadas. Por otra parte, al integrarse finalmente la comunidad negra en la sociedad norteamericana, se fue olvidando la producción racial, hasta que finalmente se dejaron de producir películas sólo para afroamericanos, lo que deja en letargo por doble partida a este tipo tan curioso de películas. Micheaux, que había nacido en tierras del sur de los Estados Unidos, responde de esta manera al Nacimiento de una nación, película realizada en el 1915 y que causó un grandísimo revuelo, porque supuso una reactivación del Ku Kux Klan. Y es que en la película de Griffith, que fue un auténtico bombazo de taquilla (y que para la mayoría de historiadores, supone la película que marca el inicio del cine moderno), se daba una visión totalmente racista de la comunidad negra, según la cual habían sido los únicos culpables de los desastres de los Estados Unidos, así como los causantes de todos los males de la nación.

Puertas adentro, la segunda película de Michaux que trataba la temática racial (a la postre la primera, pues no conservamos copia de la primera película, la ya citada The Homesteader) es una de las películas principales de este cine racial. Realizada en el año 1920, la historia ya nos da las bases que encontraríamos más adelante en otras películas del estilo. Y es que el argumento, es cuanto menos revelador. Ambientada en el sur de los Estados Unidos (un ataque que realiza Micheaux hacía las tierras de Griffith), se centra en la figura de una maestra, Sylvia, que tratará de recolectar dinero para el progreso de su paupérrima escuela en los estados del norte. Entre diversas secuencias cercanas al melodrama folletinesco típico de la época observamos las penalidades que debía sufrir la comunidad afroamericana, encarnada en nuestros protagonistas principales.

La película tiene dos problemas para la historiografía actual, el primero, que no conservamos una copia realmente decente de la película (se ha completado como se ha podido, y dentro de la película hay secuencias que faltan y que son substituidas por un interludio textual que nos explica lo que ha ocurrido en realidad), con lo que el ámbito comercial de la película ha quedado muy reducido. El segundo problema es que la película es artísticamente bastante floja, y carece de un interés formal.

Michaeux, que tenía un talento más propio de un empresario que el de un cineasta, elabora una película que se resiente mucho de su rigidez. La cámara apenas se mueve durante todo el metraje, los primeros planos prácticamente no existen, pues siempre se enfoca a los actores desde el mismo tipo de plano y la película adolece de una esencia teatral que a día de hoy le quita toda la gracia que la película tuviera en su época. Seguramente porque la forma era lo que menos le importaba a Micheaux, que lo primero que quería realizar con estas películas era un argumento que fuera cercano a las historias que le eran veladas a su comunidad. Y es que sin entender una personalidad como la de Micheaux, difícilmente habría podido salir directores como la talla de Spike Lee. Lo que hoy en día le llamamos precursor, vamos.

http://neokunst.wordpress.com/2013/12/10/mundo-mudo-puertas-adentro-1920/
Kyrios
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow