Lo primero que me llama poderosamente la atención al ver la nota de ésta película en ésta web, es que nos estamos volviendo muy pijos a la hora de ver cine,si, ya nos importa un carajo esas historias que te atrapan de lleno, te incomodan, se hacen sentir empatía por sus personajes o tratan un tema social delicado o mirado como un tabú. Que va, ya eso es cine del malo, no salen actores ni actrices conocidas, no hay acción o no veremos en ningún momento un mísero efecto especial, y ya de por si, si se nos ocurre mirar y descubrir que no es un producto del Tío Sam, ¡¡¡¡ zasssssssss !!!!!!! No nos sirve y le ponemos una nota mediocre.

Yo la verdad es que no salgo de mi asombro. La película es cierto que no se rueda de una forma espectacular, ni con una grandiosa puesta en escena, pero es lo suficientemente dura y real para que nos pongamos en el pellejo de una mujer cualquiera, en cualquier parte del mundo que por el simple hecho de ser mujer ya queda expuesta a que abusen de ella sexualmente como si de un trapo se tratase. Y cuando acude a los medios lógicos para que la defiendan, se encuentra con el rechazo más cobarde de la sociedad, amparados detrás del dinero y el poder. Eres la perjudicada y además te hacen sentir la persona que lo ha hecho mal.

Con nuestra protagonista se abre un dilema que le presenta la abogada de la otra parte, sí, te han violado, sí, te han ultrajado, sí, te han agredido físicamente, pero muchacha, acepta el dinero y olvídalo todo, porque somos el bufete más grande del país y no hemos perdido jamás un caso. Este es el panorama que se le presenta a una mujer que representa a muchas en diferentes países con unas normas y unas leyes que no defienden como se debiera a una mujer maltratada y violada.

¿Qué decisión tomará ésta chica teniendo en cuenta que está a punto de casarse y tiene un padre enfermo? ¿Optará por coger el dinero y olvidar el tema y seguir con su vida o luchará con todos los medios a su alcance para lograr justicia?