Haz click aquí para copiar la URL
España España · Madrid
Voto de Fendor:
7
Drama Irene es una mujer normal que vive sola y tiene sus aventuras ocasionales. Hace tres años que decidió dedicar su vida a ayudar a las personas que lo necesitaban, aliviando sus sufrimientos en las situaciones más críticas. "Miel" es su sobrenombre. Pero llega un día en que ella ha de enfrentarse al "mal de Grimaldi". (FILMAFFINITY)
10 de abril de 2014
13 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
Miel es la película que ha supuesto el estreno como directora de cine en largo de la actriz Valeria Golino (ya en 2010 dirigió el corto Armandino e il Madre), famosa por haber aparecido en películas como, Leaving Las Vegas, Four Rooms, Rain Man o la más reciente Caos Calmo. En la actualidad sigue interpretando, sobre todo en producciones europeas, aunque con escaso interés por parte de las distribuidoras de nuestro país (se comenta que Il capitale umano no debe estar mal). La cinta ha venido precedida por críticas positivas, tanto en su país, como allá donde ha sido estrenada, no en vano, debido a su interés, participó en la Sección Oficial (Un Certain Regard) del Festival de Cannes de 2013, aunque no consiguió llevarse el galardón.

Miel es una chica de 32 años que en realidad no se llama Miel, sino Irene, pero cuyo “trabajo” le impide dar su verdadero nombre. Éste consiste en dar asistencia a enfermos terminales o con lesiones medulares graves que desean dejar de seguir existiendo, porque su vida ha quedado seriamente limitada a eso, existir, evitándoles así más sufrimientos. O como dice Miel en una escena: “la gente a la que ayudo a morir en realidad quiere vivir”. El argumento de Miel está, a su vez basado en el libro A nome tuo (2011), del escritor italiano Mauro Covacich.

Teniendo en cuenta que se trata del primer largometraje de Valeria Golino, se puede confirmar que tiene talento para la realización, aunque en ciertos momentos se muestre reiterativa en el uso de recursos (como cuando tenemos a Jasmine Trinca de espaldas y se gira de cara a nosotros, hecho que se repite por lo menos tres veces de igual forma), pero también demuestra saber manejar la cámara para mantenernos como uno más dentro de la vida de Miel y de esas casas ajenas, como en esa escena en la que Jasmine Trinca mira a cámara a lo Harriet Andersson en Un verano con Mónica. Por otra parte, mención especial también para la actriz Jasmine Trinca (inolvidable Giorgia en La mejor juventud, una de mis películas favoritas), que en este film confirma su talento, no sólo como actriz, sino también para sostener una película de silencios y emociones contenidas con su presencia.

Además, a pesar de que mucha gente critica el uso de la música popular en el cine o les molesta que el director ponga sus canciones favoritas (si es el caso) en sus películas, en Miel el uso de la música me parece muy acertado, ya que sirve como elemento redentor en la vida de Irene y como contraste de sus dos vidas. En cuanto a la manera de contarnos su historia, me ha parecido similar en varios aspectos a La vida de Adèle, aunque en este caso por un lado tenemos a la chica y su vida familiar, de pareja y amigos, y por otro se trata el tema de la eutanasia, cómo lo afronta y en cierto modo su punto de vista. De hecho, la aparición del personaje Carlo Grimaldi (o Leche, interpretado por el actor Carlo Cecchi) es la que plantea la disyuntiva que sirve como nuevo enfoque también para ella.

En definitiva, Miel es una interesante reflexión realizada sin jugar con los sentimientos del espectador. ¿Una persona tiene derecho a morir dignamente? Porque al final, si alguien quiere suicidarse, puede hacerlo de mil formas (lo único que le pido es que no se lleve a nadie más por delante), pero una persona enferma que no pueda moverse y/o no tenga el valor de morir sufriendo, pero cuya calidad de vida considere que cada día es peor y que ello repercute negativamente en sus seres queridos, ¿necesita de nuestro consentimiento moral?
Fendor
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow