Sorprendente que este drama romántico reciba un suspenso de FILMAFFAFFINITY. No es que sea una gran película pero al menos un cinco no se lo quita nadie. La historia que gira sobre los tres personajes protagonistas, el marido infiel, la esposa engañada y la amante, esta bien concebida y contada. Es cierto que por momentos decae en intensidad y que la acción es mínima pero aun así, gracias a recuerdos, a flash-backs, consigue mantener la narración. Igualmente la intriga que se genera a la hora de escoger entre una u otra mujer se mantiene hasta el final, en un giro sorprendente y hasta inesperado.

Pese a lo dicho, las dudas de Vicent son un poco estúpidas. Vamos a ver, Olivia, es una chica con cierto atractivo, jovial, alegre y espontánea pero, por favor, no puede competir con Sally, (¡que es Sharon Stone!) no sólo porque es mucho más atractiva sino por que tiene más clase, distinción, educación, etc. En definitiva, gusta más.

Apuntar como algo a destacar la atmósfera lluviosa, oceánica, bastante atrayente, de una película rodada en la Columbia Británica (sale la bandera en un barco), supongo que en Vancouver. Y claro está el sabor de la época. Que sería de una historia de amor sin esos elementos clásicos: máquina de escribir donde teclear algún mensaje de amor, llamadas en una cabina perdida, contestadores automáticos o cartas escritas a mano con una caligrafía cuidada. Ahora se mandaría un email, se llamarían al móvil y cosas por el estilo, ¡vaya horror!