Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Sandro Fiorito:
5
Thriller. Acción. Drama Biopic sobre Michael Peterson (apodado Charles Bronson), considerado "el hombre más peligroso del Reino Unido". Bronson es un exboxeador extremadamente violento que lleva 34 años en prisión, aunque nunca ha sido sentenciado por asesinato. (FILMAFFINITY)
20 de febrero de 2012
24 de 31 usuarios han encontrado esta crítica útil
El mayor problema que puede tener una película es el de que no te cuente nada. Eso es lo que le sucede a “Bronson”, que pone todo muy bonito y bien mediante un pretencioso estilo que combina el virtuosismo visual (estupenda fotografía; atrevido pero a veces despistado montaje) con unas escenas cargadas de trampa. Sus secuencias, adornadas con una estupenda BSO, hacen fluir por ellas los vacíos y repetitivos diálogos de su protagonista, que nada cuentan, nada transmiten y por extensión nada significan. Lo único que hacen es dejar constancia de que en nuestro mundo sí hay alguien que merezca el dudoso galardón de ser el “tipo más estúpido e inútil de la Tierra”. Ese es el tal Bronson.

No se puede sentir fascinación -ni prácticamente interés- por un personaje así, cuyo modus-vivendi se limita a atizar a los guardias y dar paseítos dentro de su celda con cara de malo malísimo, con el único objetivo de que vayan cambiándole de las prisiones que pisa y de las que apenas palpamos su vida. La exploración que se realiza del interior del protagonista es tan limitada como los lugares por los que fluye su lineal y única historia (llena de lagunas), teniendo en cuenta que el tío en el que se basan los hechos ha estado prácticamente toda su vida detenido en régimen de aislamiento: siendo así, disponiendo de tan poco material para hacer esta película por la escasez de trama que puede proporcionarnos este personaje ¿era necesaria realizarla? o ¿se podía haber hecho de otra forma?.

Para compensar ese poco jugo a exprimir del relato, la realización apuesta por dinamitar toda capacidad de transmitir a través de unas soporíferas e incomprensibles escenas surrealistas en un Teatro desde el que Bronson, en una especie de representación de su vida ante un público, escupe más diálogos biográficos, de esos que no quieren decir nada y apenas importan, y donde se ve al Tom Hardy más sobre-actuado de la cinta, cuya interpretación a niveles generales no pasa del aprobado raspado. Mi generosa nota obedece al hecho de que, al menos, es una película con la que se puede pasar el rato, y ofrece una técnica que se puede disfrutar. Pero nada más. No pasará a la historia. Y lo peor es que al terminarla, sigues sin saber quién demonios era ese tal Bronson, o por qué hicieron una película sobre él.
Sandro Fiorito
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow