Héctor, un niño de siete años, se separa de sus padres porque para entregar una carta se ha bajado del tren en el que viajan, y éste ha arrancado inesperadamente. En su carta a los Reyes Magos pedía algo peculiar: conocer la eternidad. Tras concedérsele lo que desea, iniciará un viaje por el mundo mágico del tiempo y los relojes. Gracias a la ayuda del Sol y la Luna, conseguirá encontrar de nuevo a sus padres.

Inusual producción infantil de la directora catalana Rosa Vergés, con un imaginativo argumento que recuerda a la literatura dirigida a este sector del público. Ganó varios premios internacionales, entre ellos el Primer Premio para la mejor película infantil en el Festival de Giffoni de 1997. Más propia que para realizar una película era para un festival de Navidad en el colegio.

Es extremadamente aburrida, y si no fuera por este afán mío de ver todo lo que ha sido premiada o nominaada para los Goya no la hubiera visto ni aunque me pagaran. Obtuvo una nominación por la mejor música original en aquel año. Original es, eso sí, muy original. Alélense los mayores, pero también los niños de esta película, y también los que no dominen plenamente el catalán. Un 1.