Hannah Arendt fue una de las cimas del pensamiento de la segunda mitad del pasado siglo en el terreno político y social, aunque fue mucho más allá. Sus conclusiones sobre la Shoah y la maldad de los nazis fueron tan originales como mal recibidas en general.
El documental de Ada Usphin mezcla imágenes de archivo desde los años veinte, sobre todo en Alemania, junto con el proceso a Eichmann y los famosos juicios de Nurenberg con testimonios de gentes que la conocieron y trataron. Coinciden estos testigos en calificarla de una lúcida judía apátrida que formuló muchas teorías, sobre todo en el que sin duda es su libro capital, "Los orígenes del totalitarismo", generalmente mal leído e interpretado. El pensamiento de esta gran autora se esfuerza en desentrañar el comportamiento de la gente en un sistema totalitario y en cómo éste puede sostenerse, así cómo en la propia maldad de la gente cuando hay ausencia de libertades y leyes que protejan a los individuos de los abusos del poder, como fue el paradigmático caso del régimen nazi, quizá el sistema totalitario más perfecto.
El film narra con dos voces en off fragmentos de sus obras y epistolarios, lo que nos da la oportunidad de conocer parte de sus ideas. Hay dos frases suyas estremecedoras. La primera, dicha en una entrevista ya en sus últimos años: "Auschwitz es algo con lo que nunca podré reconciliarme". O en una carta a una amiga: "Soy feliz de tener el derecho de no olvidar nunca". Este film de Usphi es mucho mejor y más completo que el biopic de Von Trotta, está muy bien realizado, no es nada simplista ni maniqueo y puede ser una buena manera de introducirse en la obra de esta autora, como digo, capital.

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