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España España · Barcelona
Voto de Eduardo:
6
Aventuras. Drama Durante los años veinte, las tropas inglesas destacadas en la India mantienen durísimos combates contra los nativos que luchan por liberar a su patria del invasor. Entre ellos se encuentra el Sultán de Bhanta, cuya mujer e hijo están prisioneros en un fuerte británico. La mujer, que está esperando su segundo hijo, espera que su marido ataque el fuerte para poder dar a luz en libertad. (FILMAFFINITY)
6 de junio de 2019
5 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
La película que nos ocupa pertenece a un tipo de cine liquidado para siempre, ese pulcro género colonialista que incorpora Gunga Din, La India en llamas, El capitán King, El bandido de Zhobe, etc. Aunque haya quienes me acusarán de obsesivo, La leyenda de un valiente es, en realidad, un western, en que los indios de India son los pieles rojas de Estados Unidos, y los militares británicos los casacas azules. Pertenece a esa época en que los nativos empezaban a contemplarse como seres humanos, e incluso se apunta a la sinrazón de los militares encargados de administrar la "paz". Como película de aventuras es entretenida y entrega lo que promete. cabalgadas, emboscadas, traiciones y amores secretos. Dirige el experto Ken Annakin, autor de aquella tontería que iluminó mi infancia, Aquellos chalados en sus locos cacharros, con su all-star cast, y de unas hazañas bélicas muy digeribles, La batalla de las Ardenas. Una vez obviada cualquier verosimilitud histórica, lo mejor es sumergirse en la fantasía y disfrutar con las performances de Yul Brynner, siempre dispuesto a enseñar el torso, actor de registro limitado pero carismático en extremo (además, un señor que convirtió a Marlene Dietrich en su juguete sexual se merece todos nuestros respetos, qué diantres); Trevor Howard, en estado de dipsomanía avanzada; su amigo Harry Andrews, el malo/tonto de la función; una virginal (jijijiji) Charlotte Rampling, guapísima, en su primer papel de enjundia después de apariciones fugaces en Qué noche la de aquel día o The Knack; y la escultural Virginia North, en un improbable papel de nativa, toda curvas y montículos, señora estupenda que abandonó el cine cuando casó con un millonario (¿quién lo iba a decir). Añádase a esto unos secundarios férreos del cine británico y ya tenemos organizado el espectáculo, aderezado con la briosa banda sonora de John Scott. Un buen entretenimiento para una tarde sin otras ofertas.
Eduardo
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