Su sorprendente inicio deja claro que la única opción de enfrentarse a quienes protagonizan la película es con la violencia más radical: hablamos de un puñado de presos que se escapan, hasta ahí todo normal, a los que hay que eliminar sin complejos. No hay que capturarlos con vida, no, el objetivo del sistema no es que vuelvan a la vida en rejas que acaban de abandonar, lo que hay que hacer es liquidarlos.

¿Puede que fuera políticamente correcto en los años cincuenta y ahora no?; ¿puede sorprendernos que disparen a unos presos recién huidos, desarmados, que huyen casi sin rumbo?; bueno, nuestros protagonistas no son ángeles, algo que se verá en seguida, pero también son seres humanos. Sea como sea, arrastran más muerte que vida a su paso.

"Fuga sangrienta" no pretende sondear la moral justa, es una película de serie B que presenta a un grupo de recién huidos y desde nuestro sofá queremos saber cómo se las ingenian para tirar para adelante, queremos hacer un listado de las bajas, observar la manera en la que todo acaba y... oh caramba!! Objetivo cumplido, nos tiene entretenidos durante su hora y media.

Sí, conocemos a los personajes, podemos pensar y juzgarlos, sabemos qué quieren, y cosa nuestra es valorar sus actos. Yo la verdad es que pocas veces había visto a tanto bruto junto. Disparos, ostias de todo tipo, atropellos y hasta pedradas...