Cabía esperar que esta película iba a ser bastante típica: sensiblera, con temas de superación personal, etc. Luego nos encontramos que no es así.
La historia quiere ser diferente, dentro de lo que cabe, no rompe moldes ni nada de eso… Aunque hay una “sorpresa” que hace que la película se aparte de donde parecía que iba a llegar: al típico final feliz y demás. Lo malo es que al final estropean un poco la historia, cuando quieren dar una explicación y hacer que el malo sea menos malo, y la moraleja que pretenden dar.
Lo mejor de la película es Samuel L. Jackson, que últimamente iba un poco descarriado… Esperemos que busque encauzar de nuevo su carrera, porque ha conseguido una interpretación bastante buena, la mejor que le hemos visto en los últimos años.
“El Último Asalto” es una película del montón, ya que en principio no era nada del otro mundo y tiene sus fallos que la lastran… Pero es interesante y entretenida.