Serie española que pretendía repetir el esquema de sitcom de la famosísima "Aquí no hay quien viva" pero en clave más familiar, al utilizar un marciano. El resultado, sin embargo, dista mucho del éxito: ya no sólo por la mediocre calidad del alienígena, sino por los guiones tan malos, que parecen descartes malos de "Farmacia de Guardia", y un reparto que tampoco es demasiado acertado, con un Jorge Sanz que no llega a la simpatía que nos pudiera despertar por ejemplo José Luis Gil, que sí tiene un registro cómico bastante mejor para este tipo de personaje, y la presencia del niño protagonista, elemento fundamental en aquella época en las series españolas. En definitiva, no la recomiendo, es una pérdida de tiempo.