Como practicante de Muay Thai desde hace bastantes años, he de decir que la serie me ha aportado poca cosa. Por suerte tampoco tenía grandes expectativas.

En general la serie es muy lenta y, pese a ser de sólo cuatro episodios, se hace muy larga y repetitiva. Trata el tema del mundillo de las apuestas y su corrupción, poco más. No es algo exclusivo del Muay Thai.

Lo que sí puede sorprender a algunos que no estén familiarizados es ver a niños pegándose como los mayores, sin ningún tipo de protección extra. Cosas de la cultura tailandesa, supongo. Para nosotros es un escándalo, para ellos algo normal.

Por resaltar algo positivo, he de resaltar que las escenas de entrenamientos y combates son muy realistas y se agradece. Lo típico en las pelis de artes marciales es desbarrar a más no poder.