En aquel "slasher" hijo de "Scream" con Alicia Witt y Robert Englund titulado "Leyenda urbana", una de las muchas que contaban tiene bastante que ver con la que nos ocupa.
Pero filmar una película basada en una única leyenda urbana como esta, es algo arriesgado. ¿Cómo hacer un largometraje de la típica historia de miedo que se puede contar en 3 minutos en una acampada o fiesta nocturna?
Se trata de un ejemplo práctico de cómo hoy en día se puede hacer un film de cualquier cosa, en este caso estirando el chicle a lo bestia a partir de un argumento que no da para mucho más de un corto.
Así que aquí tenemos a una chica canguro, sola en un "casoplón", y acosada por el típico asesino en la típica invasión doméstica.
Simon West es un director de acción, y no sabe muy bien cómo dar miedo de verdad.
A pesar de durar ochenta y pocos minutos, es muy repetitiva. Como no hay muchos personajes que puedan ir palmando, Camilla Belle está prácticamente todo el rato paseándose asustada por la casa. Y claro, al alargar mucho estos paseos que casi siempre terminan en un susto falso, por mucha tensión que intenten transmitir, no lo consiguen para nada.
Pero a pesar de todo, me ha resultado levemente entretenida. Al menos no es el "slasher" tópico que ya hemos visto fotocopiado mil veces (aunque tenga un toquecito de "Scream"). Además, esa casa tan espectacular da mucho juego para los cambios de escenario. Y encima es cortísima.
Hoy me siento benevolente, y voy a darle el 5.