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Voto de Miquel:
140
Drama. Comedia
Esta es la historia de la vida de un vestido, empezando por su diseño y fabricación, y acabando por su singular forma de desaparecer. El vestido es el vehículo para contar una serie de extraños eventos que atrapa a todos los que se cruzan en su camino. Un diseñador con extrañas preferencias sexuales, un artista desmotivado, una estudiante virginal, una criada insatisfecha, un revisor de billetes de tren algo psicópata y un hombre de ... [+]
25 de octubre de 2010
9 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tercer largometraje de Alex Van Warmerdam ("Los extraños", 1992), basado en un guión original del propio realizador. Se rueda en Holanda y España (Las Lomas), con un presupuesto estimado de 3 M USD. Gana el Fipresci de Venecia y el premio de la crítica del Festival de Holanda. Producido por Ton Schippers y los hermanos Alex y Marc Van Warmerdam, se estrena el 21-III-1996 (Holanda).
La acción tiene lugar en Holanda, a lo largo de unos doce meses, que comienzan en primavera (1995) y terminan a finales del invierno siguiente (1996). Consta de un prólogo y 16 episodios entrelazados, cuya estructura recuerda las de "Winchester 73" (Mann, 1950) y "El discreto encanto de la burguesía" (Buñuel, 1972).
La película suma drama y elementos de comedia negra. El autor, que se confiesa admirador de Buñuel, crea situaciones que molestan, incomodan y, sobre todo, sorprenden al espectador. Presenta una variada galería de personajes extraños y excéntricos. La narración, densa, detallada y provocadora, hace referencia a perversiones, discapacidades, rupturas sentimentales, muertes naturales, engaños y mentiras, crímenes, crueldad, marginación, hechos desagradables, etc. Incorpora insultos gruesos, deseos insatisfechos, etc. La acción, dotada de vigor y tensión, presenta giros que mantienen al espectador entretenido gracias a una larga sucesión de hechos sorprendentes. El relato traspira un aire sombrío, que se asocia a unos personajes fatigados, desesperanzados, abrumados y vencidos por la soledad. Abundan los lances de humor. El guión está bien escrito y luce una imaginación ocurrente.
La música, de Vincent Van Varmerdam, incluye piezas jazzísticas de ritmo pausado, alguna canción rítmica y un magnífico solo de guitarra. La fotografía, de Marc Felperlaan, rodada a la manera de la "nouvelle vague", encuadra con precisión, construye hermosos travellings (cadena de confección), muestra paisajes brumosos y da un tratamiento elíptico a los elementos turbadores.
El vestido, que no aparece al principio, es una sencilla y modesta bata de mujer, sin mangas, con botonadura delantera y de colores azul y ocre. Cumple sólo funciones de leve ilación.
La película me pareció relativamente interesante, pero poco sorprendente.
La acción tiene lugar en Holanda, a lo largo de unos doce meses, que comienzan en primavera (1995) y terminan a finales del invierno siguiente (1996). Consta de un prólogo y 16 episodios entrelazados, cuya estructura recuerda las de "Winchester 73" (Mann, 1950) y "El discreto encanto de la burguesía" (Buñuel, 1972).
La película suma drama y elementos de comedia negra. El autor, que se confiesa admirador de Buñuel, crea situaciones que molestan, incomodan y, sobre todo, sorprenden al espectador. Presenta una variada galería de personajes extraños y excéntricos. La narración, densa, detallada y provocadora, hace referencia a perversiones, discapacidades, rupturas sentimentales, muertes naturales, engaños y mentiras, crímenes, crueldad, marginación, hechos desagradables, etc. Incorpora insultos gruesos, deseos insatisfechos, etc. La acción, dotada de vigor y tensión, presenta giros que mantienen al espectador entretenido gracias a una larga sucesión de hechos sorprendentes. El relato traspira un aire sombrío, que se asocia a unos personajes fatigados, desesperanzados, abrumados y vencidos por la soledad. Abundan los lances de humor. El guión está bien escrito y luce una imaginación ocurrente.
La música, de Vincent Van Varmerdam, incluye piezas jazzísticas de ritmo pausado, alguna canción rítmica y un magnífico solo de guitarra. La fotografía, de Marc Felperlaan, rodada a la manera de la "nouvelle vague", encuadra con precisión, construye hermosos travellings (cadena de confección), muestra paisajes brumosos y da un tratamiento elíptico a los elementos turbadores.
El vestido, que no aparece al principio, es una sencilla y modesta bata de mujer, sin mangas, con botonadura delantera y de colores azul y ocre. Cumple sólo funciones de leve ilación.
La película me pareció relativamente interesante, pero poco sorprendente.
